Cómo construir una pista o un picadero de entrenamiento

Para ciertos deportes ecuestres es fundamental disponer de un picadero o una pista donde entrenar diariamente.

En el Blog de Pavo hablaremos de los condicionantes a la hora de construir un picadero para que puedas tomar decisiones que repercutirán en su funcionalidad a largo plazo.

Un picadero es la parte de la instalación hípica que sirve para entrenar, que está delimitado en su perímetro, y cuyo suelo tiene unas condiciones especialmente favorables para el trabajo montado. A veces, a este suelo también se le llama pista, aunque generalmente se reserva el término para circuitos longitudinales, como pistas de galope o pistas de carreras.

Los picaderos pueden tener tejado o no y las paredes pueden estar, a su vez, abiertas en su parte superior o cerradas, pero siempre con un límite inferior cerrado por un muro o vallado, y con una protección o guardabotas. Hablaremos, por tanto, de picaderos cubiertos o descubiertos y abiertos o cerrados.

Deben de ser lo más grandes posible para aquello que queremos o necesitamos. Al menos con una superficie de 20 por 60 metros, de una pista de doma. Para salto son incluso más grandes. Por cada metro que añadas, tendrás muchísimas más posibilidades de uso.

Define los usos del picadero

Es lo primero que te debes de plantear: ¿para qué disciplina?, ¿habrá concursos o solo será ocio?, ¿de uso particular o abierto al público?

Cada disciplina requiere unas medidas oficiales si vas a hacer concursos en ella. También, cada disciplina requiere una dureza distinta de la pista o incluso pistas de diferente material. La realidad es que en un picadero se suelen practicar diversas disciplinas y hay que buscar una solución intermedia.

Ten cuenta las condiciones de partida a la hora de la construcción de la pista de entrenamiento

Superficie del terreno

Si vas a hacer doma clásica, salto o disciplinas similares, necesitarás un suelo horizontal y será una buena inversión lograrlo desde el principio de la construcción.

Si partes de una zona pantanosa o con roca, tal vez debes de reconsiderar la ubicación por los costes o las complicaciones posteriores.

Climatología de la zona

Esto habrá que tenerlo en cuenta sobre todo en lo que se refiere al drenaje y el riego.

Localización dentro de la instalación hípica

Si va a formar parte de una instalación mayor, hay que diseñar su ubicación desde el principio del diseño general.

A veces, nos sentimos tentados de colocar el picadero cerca de árboles o setos para aprovechar su sombra y usarlos como cortavientos, o como propio cercado, pero la caída de ramas y hojas dificultará su mantenimiento diario, y el crecimiento de raíces puede dificultar el drenaje y el rastrillado.

Estructuras principales de un picadero

Base

Donde irá el drenaje, y la parte más importante, la que evitará que se formen charcos, zonas blandas, que se hunden. Una buena base permanecerá intacta toda la vida, solo habrá que mantener la parte superficial. La base es la que te dará quebraderos de cabeza si no la haces bien y ahorras costes en ella porque no se ve.

Capa superior

Suele ser la parte que más preocupa y en la que se centra nuestra cabeza, pero la base es lo primordial. La capa superficial es fácil de cambiar si la que has puesto no te convence.

Riego

Por aspersores, mediante mangueras o, incluso, riego subterráneo, que garantice que no se levanta polvo, pero a la vez facilite que el suelo sea fácil de rastrillar o apisonar, ajustando la dureza de la pista de tal modo que permita comodidad en el desarrollo de la disciplina y, a la vez, sea saludable para los tendones.

Estructuras de seguridad

Como puertas de entrada adecuadas y guardabotas.

Las puertas de entrada deben de tener la altura del perímetro, ser muy anchas y abrir hacia el exterior para evitar accidentes de los caballos en pista al abrirse.

Tienes más información en Cómo evitar accidentes comunes en caballos por instalaciones inadecuadas

Picadero para dar cuerda

Un picadero solo para dar cuerda, aunque no es básico, puede ser muy útil para reducir gastos en mantenimiento. Evitará el sobreuso de la pista principal y la formación de círculos en el firme, que habrá que alisar continuamente. Un diámetro adecuado sería de 20 a 25 metros.

Permisos

Antes de planificar ponte en contacto con tu ayuntamiento y pregunta las condiciones de construcción. A veces hay sorpresas y donde habías pensado construir, no se puede. Allí también te dirán cuáles son las opciones más factibles, y a partir de ahí comienzas la planificación.

Presupuesto del que dispones

Es obvio que el presupuesto es un factor limitante. Si tienes que ahorrar y recortar, hazlo en tamaño y ornamentación, nunca en seguridad o en la capa base.

Si no dispones de presupuesto para una pista de mayor tamaño, planifica la de ahora pensando en aumentarla, reservando el espacio hacia donde crecerá.

Si no dispones de dinero para cubrirla, planifica también como deberá ser el perímetro para después añadir un tejado sin complicaciones mayores.

 

Construir un picadero es un tema muy amplio. Con este post hemos querido dar unas pinceladas, sobre todo desde el punto de vista práctico, pero es evidente que lograr una pista duradera en el tiempo, segura, cómoda y de fácil mantenimiento, no es tarea de inexpertos, de modo que lo mejor es que la desarrolle una empresa especializada, que sepa adaptarse a todos estos condicionantes y realice el proyecto desde sus cimientos. Además, suelen incluir tanto la realización de los permisos administrativos, que pueden ser tediosos, como garantías en el tiempo, que suelen ser muy interesantes para nuestra tranquilidad.

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