05 Abril 2022 Nutrición
Categorías
|
Cuál es el mejor forraje para los caballosEl forraje debe de suponer, al menos, el 70% de la dieta del caballo. Conociendo este dato, nos damos cuenta de su importancia. En el Blog de Pavo hablaremos de los principales forrajes, para que, conociendo sus características, puedas elegir el mejor para las necesidades de tu caballo. Pulpa de remolachaLa pulpa de remolacha es un subproducto fibroso de alta calidad. A esta pulpa se la conoce como “superfibra”, ya que la fibra digestible es de un 80%. Supera a la de los henos, que está en un 40%. Si a esto le sumamos que la cantidad de energía que suministra es superior a la mayoría de los forrajes, pero no proviene de azúcares ni almidón, el resultado es un alimento muy energético que no tiene los riesgos de los cereales. El conjunto se traduce en que el caballo gana peso o tiene más energía para usar en el trabajo, sin aumentar su nerviosismo. No puede usarse como fuente única de fibra, así que debe de combinarse con otros forrajes. Tienes más información en un post del blog dedicado exclusivamente a la pulpa de remolacha. AlfalfaLa alfalfa es otra “superfibra” por su alto valor nutritivo, pero es alta en proteína y calcio, por lo que no debe usarse como único forraje. Estos valores altos de proteína y calcio hacen que, mezclada con heno de pradera, sea un forraje ideal para yeguas en gestación o lactación y potros en crecimiento. También es perfecta para caballos hard keeper, o caballos en entrenamiento intenso, difíciles de mantener en su peso y en los que no queremos aumentar los cereales para evitar el peligro que ello conlleva. Pavo FibreBeet, una combinación de alfalfa y pulpa de remolacha que, a dosis de 100 g por cada 100 kg de peso vivo, mejora la calidad del forraje habitual del caballo, lo que supondrá una mejor condición corporal y aportar más energía para el entrenamiento. HenoEs un forraje cuya conservación se realiza por secado. Según el vegetal del que se parta, lo clasificamos en heno de leguminosas, heno de gramíneas o heno de pradera. Hemos hablado de ellos ampliamente en el post Henos para la alimentación del caballo. La calidad del heno no solo depende del vegetal del que se parte, sino de otros muchos factores, como el momento de corte, la calidad del secado, su buen almacenaje y su antigüedad. PajaLa paja no es un buen forraje: es muy alta en lignina y, por tanto, poco digestible. Con un valor nutricional escaso y alto riesgo de producción de cólicos, es mejor descartarla incluso como cama. Hierba verdeLa hierba en el campo tiene un alto porcentaje de agua, por lo que deben de comer grandes cantidades para satisfacer las necesidades energéticas. Estamos hablando de unos 75 kg para un caballo medio que solo tome hierba. Eso significa un gran desgaste para un prado, además de las pérdidas por pisoteo. Todo ello hace necesaria una muy buena gestión del pasto si no queremos agotarlo, o que la hierba sea deficitaria en vitaminas, minerales y oligoelementos. Es muy complicado tener bien alimentado a un caballo solo a base de hierba, no solo por la cantidad necesaria, sino por la calidad. Debido a esto, se suele combinar con otros forrajes y con pienso. Esto equilibrará las deficiencias de la hierba verde. Si un caballo está alimentado solo a base de hierba, habrá que suministrarle un suplemento que equilibre sus carencias. HenolajeEs un forraje que se obtiene por fermentación de la hierba. Su elaboración requiere buenos conocimientos, y la conservación debe de ser de gran calidad, para evitar problemas importantes para la salud del caballo. Su sistema de conservación hace que esté libre de polvo, lo que puede ser muy beneficiosos para caballos con asma. Una vez abierta la bala, hay que consumirlo rápidamente. A cada caballo su forrajeEl mejor forraje es aquel que resulta apropiado para la actividad física y el estado fisiológico del caballo, de modo que, el que es apropiado para una yegua en gestación, puede no serlo para un caballo en descanso, aunque la calidad sea muy buena. En una explotación ganadera equina puede resultar complicado tanto la compra como el almacenaje de diferentes forrajes según estas necesidades, y se suele tener un forraje “generalista” que sirva de base a la mayoría de los caballos, independientemente de su actividad deportiva o su estado fisiológico. Pero esto no es lo correcto, ¿cómo lo solucionamos? Alternativas y complementos del forrajeEs muy recomendable, por tanto, tener sustitutivos del forraje, que añadidos al forraje base en la cantidad adecuada a las necesidades de un caballo en particular, mejoren la calidad y/o la energía de la dieta de modo personalizado. Así, cada caballo tendrá “Su Forraje”. Y no olvidemos que el forraje no solo tiene función nutritiva, tiene otras funciones, como activar la salivación para que esta actúe como neutralizante de la acidez del estómago y así reducir la incidencia de problemas digestivos como las úlceras. Por eso, el forraje debe de suministrarse antes del pienso o los cereales, y así, el forraje, junto con la saliva producida, protege el estómago. Otro modo de activar la salivación durante la ingesta del concentrado es mezclarlo con piensos especiales para favorecer la masticación, ralentizándola, aumentado la producción de saliva, y en definitiva favoreciendo la digestión, ya que al obligar a masticar mayor número de veces evitan que traguen entero el grano o el pienso.
|